LAS TRES PRIORIDADES

La herida de la injusticia y la violencia: En un mundo de desequilibrios que atentan contra aspectos esenciales de la vida humana, las comunidades VEDRUNA quieren ser una presencia y una acción que

• Promueva la cultura de la paz y la no violencia, y apoye a los grupos en situación de frontera y riesgo.
• Avive la conciencia de la dimensión política de la caridad a través de la reflexión y la acción en diversas plataformas sociales.
• Se implique en la transformación del injusto sistema económico imperante, arriesgue en una economía alternativa, invierta en fondos éticos e impulse iniciativas de desarrollo y comercio justo.
• Una sus fuerzas con el Laicado Vedruna y con cuántos, atentos a estas nuevas llamadas, están abiertos al cambio.
• Siga dando pasos hacia los márgenes, asumiendo las consecuencias que conlleva compartir el destino de los pobres.
• Trabaje a favor de la erradicación de las causas de la pobreza y apueste por la educación elemental, la salud básica y la formación y promoción para todos.

La herida ecológica: Ante el desgaste insostenible de nuestro eco-sistema, que nos aleja del sueño de Dios de hacer de la tierra una casa habitable para la humanidad, las comunidades VEDRUNA se sienten urgidas a:

• Avivar la conciencia ecológica y emplear sus capacidades en alentar todo germen de vida e impulsar un desarrollo sostenible.
• Contribuir a un despertar de las conciencias a favor de un uso responsable de los recursos naturales.

La herida del vacío de sentido y de la ausencia de Dios: Ante el profundo vacío de sentido creado por estilos de vida consumistas y materialistas, en sociedades progresivamente secularizadas, las comunidades VEDRUNA se sienten interpeladas a:

• Alentar la vida y despertar la sed de trascendencia.
• Acompañar en actitud de escucha y respeto a quienes buscan respuestas.
• Testimoniar la alegría y esperanza que el seguimiento de Jesús produce en nosotras.
• Ofrecer con transparencia y sencillez el anuncio del evangelio de Jesús, como camino generador de vida.